Moonlight

No confundir con Luz de luna, la mítica serie ochentera que era la favorita de mi infancia y a la que un día dedicaré un post como dios manda.

Género: Diremos policíaca, aunque sea más una serie de detectives... ah! y un pequeño detalle, también es una serie de vampiros. ¿Detectives vampiros? Sí, yo también pensé que los guionistas habían fumado algo raro y probablemente la audiencia también, dado que la serie fue cancelada tras una primera y última temporada pero mi amiga María y yo estábamos extremadamente enganchadas.

Sexo: Difícil, difícil, pero diré femenino. Ahora que está de moda Crepúsculo creo que ha quedado demostrado que los vampiros siempre han estado más pensados para mujeres que para hombres. Aparte, creo que pocas mujeres se resistirían a un bocado en el cuello de Mick St. John.

Rostros conocidos: Alex O'Loughlin, mi principal devoción serial, a posteriori protagonista de Hawaii 5.0, Jason Dohring, que venía de hacer de Logan en Veronica Mars y Shannyn Sossamon de Dirt o la película 40 días y 40 noches.

Trama: Mick St. John es un vampiro bueno que trabaja como detective privado cuando el destino hace que se cruce con Beth, una periodista (demasiado fea para hacer pareja con Mick, todo hay que decirlo) a la que salvó cuando era niña de las garras de su exmujer Coralinne... o mujer o... es que no sé como anda el tema de los divorcios entre vampiros. 

A partir de ahí, se suceden las tramas más variopintas de investigaciones tanto detectivescas como periodísticas, a la vez que hay conjuras vampíricas y todas esas cosas. Lo siento, es que es difícil explicar de qué va todo el tema sin hacer spoilers.

Temporadas: Una única temporada de 16 capítulos.

La recomiendo: porque aunque sé que nada de lo que he escrito aquí puede convencer para verla, yo fui capaz de verla. Vale, en parte porque Mick St. John era mucho Mick St. John, pero que en serio la serie tiene su punto, al menos aunque sólo sea por ver cómo puede seguir adelante una serie tan surrealista.